- La unión hace la fuerza
José Luis Moctezuma
www.noticiasconmoctezuma.com
Dice una frase que somos más los buenos que los malos. La Villa de Atencingo, ubicada en el municipio de Chietla, conocida y reconocida por la calidad de azúcar que produce el ingenio y obreros ha sido en últimos meses objetivo de ejecuciones, ajustes de cuentas, feminicidios, asaltos a mano armada, venta de drogas y hasta desaparición de personas.
La mañana del sábado se registró la fuga, acomulación de gas y explosión del local de la señora Antonia, vendedora de memelas y gorditas en las casetas del centro quien sobrevivió a la explosión de un cilindro de gas que días antes le habían detectado con fuga pero no fue atendida.
El flamazo y explosión sacudió el centro de Atencingo y locales sobre la Avenida Benito Juárez. Junto al mercado. El miedo y crisis de los testigos era latente por qué pudo ocurrir una tragedia mayor, todo quedo en daños materiales.
Ahí estaban ayudando a Doña Antonia profesionistas, obreros, mototaxistas, un cobrador, comerciantes, amas de casa, chóferes del transporte, todos acarreando agua para sofocar el fuego, hasta el Ingenio Azucarero apoyó prestando algunos extinguidos y rescatar el tanque y luego liberar el gas.
De inmediato en tan solo unos segundos Atencingo su gente volvió a ser unido y solidario; un solo ser enfocado en ayudar y rescatar a los ocupantes de esta casilla ubicada al pie de la avenida principal Benito Juárez. Todo corrieron ayudar en algo. La autoridad como siempre ocurre llegan tarde, cuando todo ya pasó.
Ahí estaban movidos los profesionistas, obreros, mototaxistas, un cobrador, comerciantes, chóferes del transporte acarreando agua, para sofocar el fuego, hasta el ingenio azucarero apoyó prestando algunos extinguidos y rescatar el tanque y luego liberar el gas para terminar con el peligro.
¿Quién llegó primero?. Eso no importa. Salvar la vida y el patrimonio de Doña Antonio y su familia fueron razones de sobra para que Atencingo se volviera a unir en un mismo objetivo.
Desde hace meses los pobladores y autoridades se han visto distantes. Décadas atrás cuando Atencingo se quedaba sin agua, sin obras o faltaba la seguridad corrían unidos a Chietla y reclamaban y protestaban en la exigencia de tener una comunidad con servicios públicos eficientes y con un trato digno para sus familias. Ese espíritu se apagó.
«Échale agua fría, sacalo, traigan más agua, cierren el paso a los carros para evitar otro accidente», son los gritos que escuchamos y atestiguamos todos los videos que compartimos a través de las redes sociales.
«Somos más los buenos que los malos y la unión hace la fuerza».
Nos leemos pronto…
Facebook: Noticias con Moctezuma
Twitter: @Joselmoctezuma
Comments